
Luego de conocerse que el Papa Francisco había autorizado al Dicasterio para las Causas de los Santos promulgar el decreto que reconoce el milagro atribuido a la intercesión de la Beata María Antonia de Paz y Figueroa, conocida como “Mama Antula”, todo el país comenzó a hablar de ella, ya que, además, será la primera mujer argentina en ser declarada santa.
Sin embargo, a pesar que se festejó esta noticia, aún hay muchas personas que desconocen la historia de esta por ahora Beata, que nació y evangelizó en tierras santiagueñas.
Mama Antula, de nombre María Antonia de Paz y Figueroa, nació en 1730 en Silípica, provincia de Santiago del Estero, aun por ese entonces territorio dependiente del reinado de España.
Trabajó desde muy joven con los jesuitas colaborando en la catequesis, elaboración de indumentarias, en la organización de ejercicios espirituales, entre otras actividades dentro del territorio santiagueño, al cual recorrió a pie para llevar el Evangelio.
Tras la expulsión de los jesuitas del territorio americano por parte de la corona española, Mama Antula se fue a Córdoba, y desde allí partió a pie hacia Buenos Aires, donde se dedicó durante 20 años a predicar el mensaje de Cristo.
En 1795 fundó la Santa Casa de Ejercicios Espirituales en Buenos Aires, la que aún cumple su misión bajo el cuidado de la Congregación Hijas del Divino Salvador. Falleció el 7 de marzo de 1799 en esa residencia. Sus restos descansan en la iglesia Nuestra Señora de la Piedad en Buenos Aires por deseo de la misma, ya que fue el primer lugar donde fue cobijada cuando arribó a esa ciudad. Allí la curaron ya que había sido agredida en el camino.
El milagro que permitió su beatificación fue aprobado el 4 de marzo de 2016. Este consistió en la recuperación inexplicable, en 1904, de la religiosa María Rosa Vanina, de las Hijas del Divino Salvador. La religiosa sufría de una colecistitis aguda con shock séptico, luego de que los médicos pronosticaron una muerte segura.
Gracias a ello, el 26 de agosto de 2016, María Antonia de Paz y Figueroa fue beatificada por el delegado del Papa Francisco y entonces prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el Cardenal Angelo Amato, en un gran evento que se realizó en la rotonda del puente autopista en el acceso a la ciudad de Santiago del Estero.
También, como detalle para destacar, en el mes de septiembre de este año la beata argentina Mama Antula fue declarada Doctora honoris causa por la Universidad de Santiago del Estero, convirtiéndose en la primera beata de América del Sur en obtener esta distinción.